Ingredientes:
- 500 ml de leche + 250ml (aparte)
- 60 g de maicena
- 160 g de azúcar
- 1 rama de canela
- la piel de medio limón
- 2 huevo + 2 yemas (aparte)
- harina para rebozar
- Aceite para freír
- Azúcar para rebozar
- Canela en polvo
Preparación:
- Mezclar la maicena y las dos yemas en 250 ml de leche y remover hasta que esté bien mezclada y sin grumos.
- Calienta el resto de la leche junto con el azúcar, la rama de canela y la piel de limón y retira del fuego justo antes de que empiece a hervir.
- Añade la mezcla de maicena y remueve con un batidor de varillas para que se integren bien todos los ingredientes.
- Vuelve a colocar el cazo a fuego lento y cuece removiendo continuamente hasta que espese (ha de quedar una textura como la crema pastelera).
- Retira del fuego y vierte la preparación en una fuente rectangular que sea un poco honda (la leche frita ha de quedar de un grosor de unos 2 cm).
- Cubre con papel film tocando la preparación para que no se forme piel y deja enfriar como mínimo dos horas o mejor de un día para otro.
- Una vez cuajada, corta las porciones del tamaño que más te guste sin que sean excesivamente grandes.